Lo que daría por entrar en tu cabeza una vez más. O volver tiempos atrás donde cada milésima de segundo era cada vez más bonita, o que con una caricia. Todo lo que es, o ha sido, empieza a formar parte de aquel sueño.
Nada es imposible, creo. Pero probablemente volver a tenerte solo sea algo eterno.
Todavía lo recuerdo..cada..cada puto momento.
" No eran más de las doce cuando estaba en mi sofá preferido, con mil mantas, y un montón de envoltorios de chocolate acabados, con el último bocado en mi boca, cuando sí, por fin sonó. Pero aquel sonido no sonó como los demás, cuando me timbraba mi madre para traerme la comida en un taper, o cuando venía el pizzero, no, esta vez, sonó taan especial.
Me estremecí, aunque todavía no se muy bien porque, podría ser cualquiera. Peri abrí. Y si, allí estaba, empapado de la chovizna que estaba arroyando el cielo, y todavía le colgaba alguna lágrima.
- Lo siento, soy un idiota. Nosé que me pasa. Tengo miedo..de quererte, de quererte tanto, que después te vayas. De quererte de tal manera, que pueda enloquecer, pero que coño, te quiero, y eso, creas que no, no puedo ni remediarlo, ni quiero.
- Crees que me voy a ir en cuanto me quieras?
Estás ..demasiado equivocado. Te quiero más que nada, ese es tú problema? Porque el mío sí. Crees que jamás me puse nerviosa cuando te veía por la otra acera, aunque fuese de lejos, o que nunca quise recibir tan solo un puto toque, para saber que te acordabas de mí? Equivocado, es lo único que creo que estás."
Y así, sin más, le cerré la puerta y me fui,. me tiré al suelo, y me quedé dormida, llorando y con frío..Pero después de doce horas, me vestí, me preparé un chocolate caliente, y al abrir la puerta..el estaba allí, tumbado, esperandome.
Entonces supe, sí.
Este es el eterno.
